Hans Breder |
Cuando organicé aquella tertulia tenía dos objetivos: 1.Que todos conocieran las nuevas obras del artista invitado (Juan Bremel). 2. Conseguir una cita con alguien que deseaba conocer desesperadamente.
Pero se nos fue la mano, al principio se trató de un inocente intento de cooperación, gentilmente todos nos pusimos a disposición de Bremel porque quería crear sobre la marcha, improvisando, un collage. Nos pareció un juego divertido y cada uno empezó a proponer ideas. Las ideas fueron tomando forma, uno propuso el pie, otra el brazo, aquel la mano, la pierna de Sara, tan larga y bien torneada, mi espalda, bueno, no parecía complicado ese engranaje.
La complicación surgió con el roce, en mi espalda se apoyó un trasero, la mano de alguien se posó sobre mi pierna, mis ojos quedaron prendados de unos pies que ni sé a quién pertenecían, así, entre roce y roce surgieron emociones que se nos escaparon al control. El ambiente se caldeó de tal manera que dejó de hacer frío y el creciente calor fue descubriendo más cuerpos, más roces, más sensaciones. No quieran que les cuente el transcurso del acto, no recuerdo mucho, solo piel, mucha piel, calor y más calor, mi corazón acelerado y partes de mi cuerpo que tendrían que haber permanecido ocultas totalmente liberadas.
Juan disfrutó mucho, eso me consta porque pudo crear a su antojo. De aquella noche ha surgido una extensa exposición que recorre el país. El resultado ha tenido tal éxito que ha tratado de volver a reunirnos para su próxima creación y nadie ha respondido a su llamada.
Cada uno hemos visitado la exposición a escondidas, no porque se nos pueda identificar, que el fotógrafo fue muy cuidadoso y no se ven caras en ningún momento, sino porque me ruborizo cada vez que una imagen viene a mi mente y otro tanto les pasará, imagino, a mis compañeros de aventura.
Para mí, que había ideado, lo reconozco, aquel evento para conseguir el teléfono de Sara, el perjuicio ha sido grande. Un desastre, no me lo digan, lo sé.
© Yashira 2020
La propuesta para el viernes creativo del Bic naranja es una foto de Hans Breder (1935-2017), fotógrafo germano-estadounidense con una obra visual tan impactante como efímera. para escribir un relato de enredo, divertido y loco. Por si quieres conocer más del artista su página es: